15 Mar El TB brilló en la primera noche del concierto en homenaje a Piazzola
En el regreso a la presencialidad al Teatro, el público ovacionó de pie y emocionado a los artistas en la Sala Auditórium.
En el marco de las veladas programadas en el Teatro del Bicentenario para homenajear a Astor Piazzolla al cumplirse los 100 años de su nacimiento, el Ensamble Contrabando dirigido por Esteban Calderón, se lució interpretando obras del gran músico marplatense y otras dedicadas al autor de “Adiós Nonino”.
Después de un año casi sin actividad a raíz de la pandemia de covid-19, el escenario de la Sala Auditórium del Teatro del Bicentenario restauró, protocolo sanitario mediante, el regreso del público a sala. La potencia de la obra y la figura de Piazzolla, por varias razones uno de los músicos más trascendentes, resultó el disparador para el retorno a su actividad presencial.
A sala llena y aplaudidos de pie, y bajo el título “Centenario Piazzolla” el programa de Ensamble Contrabando contó con la participación de Indira Gonzalez Oliva (violín), Rayna Diankova (viola), Vesselin Yanakiev (violonchelo), Laura Vicentela (contrabajo); Nicolás Bustos (guitarra eléctrica), Tito Oliva (piano); Esteban Calderón (bandoneón, dirección y arreglos) y la participación de Diego Flores como cantante invitado.
Con un exquisito repertorio incluyó “Cité Tango”, “Meditango”, “Undertango” y “Violentango”; le continuó “Fuga y Misterio”, el fragmento de la ópera-tango María de Buenos Aires, compuesta por Astor Piazzolla y Horacio Ferrer y estrenada en 1968. Enseguida continuó con “Coral”, “Chiquilín de Bachín” y “Balada para un loco”. El cierre del espectáculo finalizó con “Adiós Nonino”, la obra más representativa de Piazzolla, compuesto hacia 1959 cuando Astor realizaba una gira por Centroamérica. En esos momentos recibió la noticia de la imprevista muerte de su padre, don Vicente Piazzolla, a quien apodaban Nonino.
Al final, luego de una hora de música, el aplauso eufórico del público presente llenó de magia los espacios vacíos.